LA IZQUIERDA LATINOAMERICANA Y LA GOBERNABILIDAD DEMOCRATICA
UN MAPA IDEOLÓGICO REGIONAL
Por: Eduardo Bueno Leon
Pese a que muchos politólogos y comunicadores inspirados en intelectuales norteamericanos conservadores como Daniel Bell, Samuel Huntington y Francis Fukujama; pero sobre todo en el economicismo neo liberal, han decretado la muerte de las ideologías, de las propuestas de cambio social y económico, y niegan que exista una diferenciación entre izquierda y derecha, lo cierto es que los ciudadanos latinoamericanos vienen votando masivamente por Gobiernos de Izquierda o centro izquierda, cuyos líderes no niegan su filiación y más bien la promueven. Leer mas en:
Columna de Analisis Politico Puerto de Palos www.pueblocontinente.com/puerto060629.htm
miércoles, junio 28, 2006
miércoles, junio 21, 2006
O Vecino Mais Grande
EL misterio de la voz de ciénaga que sale de la garganta de Lula da Silva pudo ser parcialmente resuelto el martes por la tarde. Al término de la reunión con Alan García, el mandatario brasileño sacó una botella de cachaza que, afirmó, costaba unos US$ 300. Tal exquisitez no se desperdicia en caipirinha y el brindis tenía que consumarse en estado puro.
El reloj marcaba las dos de la tarde y los miembros de la delegación peruana no habían probado bocado en lo que iba del día. La cachaza les movió el piso pero, a juzgar por los resultados de la jornada, bien valió la pena. El almuerzo con el canciller Celso Amorim esperaba en el Palacio de Itamaraty. Lula siguió viaje a una provincia del interior para ver el partido en el que Brasil se impuso a Croacia por uno a cero.
Hasta ahora a García le va de perlas como Presidente electo. Luiz Inácio Lula da Silva envió su avión para recogerlo y lo devolvieron esa misma noche. Aunque AGP declaró que la conversación fue “deschavizada”, el gesto del brasileño equivalió a devolverle un portazo en las narices al venezolano. Los guiños hacia el vecino hechos durante la campaña fueron correspondidos de la mejor manera posible.
La próxima semana seguirá su recorrido con un viaje a Colombia para visitar al recientemente reelegido Álvaro Uribe.
Y en casa el perfil del aprista se beneficiaba de los tumbos que daban sus contendores en la campaña. Ollanta Humala estaba literalmente en Bolivia mientras su bancada todavía sin estrenar entró en crisis (ver nota aparte). La mezquindad que mostró al no saludar al ganador terminó de garabatear la caricatura de cachaco autoritario frente a los ojos de sus críticos.
Aunque llamó por teléfono, Lourdes Flores tampoco tuvo el gesto democrático del saludo en persona. Se volvió a ausentar del país mientras su frágil representación parlamentaria de apenas 17 puestos rumia sus propias dificultades. La rápida división de Unidad Nacional y los pocos reflejos de la líder dan a especular sobre lo que pudo ser una segunda vuelta frente al creciente arrastre de Humala.
“No hay tercera oportunidad”
En los últimos meses a García lo acompaña una estrella no solamente reggaetonera sino también lechera. Lula le recibió muy cordialmente y casi de saque le recordó que había sido el único Presidente que lo recibió tras la derrota que Fernando Collor de Mello le inflingío en 1989. El brasileño recitó de memoria los consejos prestados entonces por el peruano, que lo instó a perseverar en la lucha.
Y perseveró. Lula repitió el plato en 1994 y 1998. En ambas ocasiones fue superado por Fernando Henrique Cardoso, quien en la última justa se llevó la elección en primera vuelta. Cuatro años después Lula tuvo finalmente su oportunidad cuando obtuvo el mayor número de votos de la historia democrática brasileña: 52.4 millones, el 61% del total de sufragios. Tenía 57 años, la misma edad que hoy tiene García.
Lula le confesó a AGP que agradecía haber llegado a la Presidencia recién al cuarto intento, pues el puesto lo alcanzó con la madurez encima. Polvo había mordido. Hay que recordar que la primera vez, contra el posteriormente depuesto Collor de Mello, el líder del Partido de los Trabajadores lideraba holgadamente las encuestas hasta pocas semanas antes de la elección.
En el transcurso de esa charla sobre testarudez y resurrección, el antiguo sindicalista le recordó a García que la vida le estaba regalando una segunda oportunidad. No existen las terceras oportunidades, le advirtió con la voz de cachaza como en una de esas parábolas de las que tanto gusta últimamente el mandatario electo.
El diálogo se concentró en el tema fundamental para ambos: la reducción de la pobreza. Alan García aprovechó la mayoría de las dos horas de encuentro para preguntarle sobre su experiencia. Lula le describió el tobogán del equilibrio macroeconómico y las políticas sociales. Es difícil, coincidió con García, pero hay que “meterse a fondo”.
Salida al Pacífico
La posibilidad de un TLC entre Perú y Brasil, tan mencionada por Alan García, fue tocada de refilón. Ya quedó entendido que hay un proceso en marcha con Mercosur (ver recuadro). El peruano viró entonces su atención al aumento de las inversiones brasileñas. Es muy probable que, después de una visita de Estado al Brasil en agosto próximo, se realice un encuentro empresarial de alto nivel entre ambos países. “Declaro al Perú un país abierto a los capitales brasileños, convoco a los industriales e inversionistas brasileños”, explicitó García a su salida.
A su vez, Lula dejó en claro que el Perú era la salida natural de Brasil al Pacífico. El aprista respondió con proyectos de multiplicación de conexiones viales y ferroviarias y alianzas energéticas. Ofreció a Petrobras la posibilidad de aliarse con Petroperú para explorar en nuestro país.
El próximo 24 Lula será proclamado como el candidato del PT. Los números son propicios. Una encuesta dada a conocer el martes último le asigna el 48% de las preferencias. Su rival más cercano, el socialdemócrata Geraldo Alckmin, tiene apenas el 18%. Si esa repartición se mantiene hacia octubre Lula ganaría en primera vuelta, pues en Brasil bastan los votos válidos para conseguir la mayoría absoluta.
La tendencia ascendente del brasileño era difícil de imaginar el año pasado, cuando los escándalos de corrupción estremecieron al PT y el grueso de su plana mayor salió escaldado por la puerta trasera.
A pesar de todo ello Lula tiene muy grandes posibilidades de conseguir un nuevo mandato. La supervivencia obedece a los tiempos en marcha. Su plataforma se basa en lograr mayor crecimiento aparejado de redistribución. Y García tiene los pies puestos en un trampolín continental inmejorable (Enrique Chávez).
CARETAS
El reloj marcaba las dos de la tarde y los miembros de la delegación peruana no habían probado bocado en lo que iba del día. La cachaza les movió el piso pero, a juzgar por los resultados de la jornada, bien valió la pena. El almuerzo con el canciller Celso Amorim esperaba en el Palacio de Itamaraty. Lula siguió viaje a una provincia del interior para ver el partido en el que Brasil se impuso a Croacia por uno a cero.
Hasta ahora a García le va de perlas como Presidente electo. Luiz Inácio Lula da Silva envió su avión para recogerlo y lo devolvieron esa misma noche. Aunque AGP declaró que la conversación fue “deschavizada”, el gesto del brasileño equivalió a devolverle un portazo en las narices al venezolano. Los guiños hacia el vecino hechos durante la campaña fueron correspondidos de la mejor manera posible.
La próxima semana seguirá su recorrido con un viaje a Colombia para visitar al recientemente reelegido Álvaro Uribe.
Y en casa el perfil del aprista se beneficiaba de los tumbos que daban sus contendores en la campaña. Ollanta Humala estaba literalmente en Bolivia mientras su bancada todavía sin estrenar entró en crisis (ver nota aparte). La mezquindad que mostró al no saludar al ganador terminó de garabatear la caricatura de cachaco autoritario frente a los ojos de sus críticos.
Aunque llamó por teléfono, Lourdes Flores tampoco tuvo el gesto democrático del saludo en persona. Se volvió a ausentar del país mientras su frágil representación parlamentaria de apenas 17 puestos rumia sus propias dificultades. La rápida división de Unidad Nacional y los pocos reflejos de la líder dan a especular sobre lo que pudo ser una segunda vuelta frente al creciente arrastre de Humala.
“No hay tercera oportunidad”En los últimos meses a García lo acompaña una estrella no solamente reggaetonera sino también lechera. Lula le recibió muy cordialmente y casi de saque le recordó que había sido el único Presidente que lo recibió tras la derrota que Fernando Collor de Mello le inflingío en 1989. El brasileño recitó de memoria los consejos prestados entonces por el peruano, que lo instó a perseverar en la lucha.
Y perseveró. Lula repitió el plato en 1994 y 1998. En ambas ocasiones fue superado por Fernando Henrique Cardoso, quien en la última justa se llevó la elección en primera vuelta. Cuatro años después Lula tuvo finalmente su oportunidad cuando obtuvo el mayor número de votos de la historia democrática brasileña: 52.4 millones, el 61% del total de sufragios. Tenía 57 años, la misma edad que hoy tiene García.
Lula le confesó a AGP que agradecía haber llegado a la Presidencia recién al cuarto intento, pues el puesto lo alcanzó con la madurez encima. Polvo había mordido. Hay que recordar que la primera vez, contra el posteriormente depuesto Collor de Mello, el líder del Partido de los Trabajadores lideraba holgadamente las encuestas hasta pocas semanas antes de la elección.
En el transcurso de esa charla sobre testarudez y resurrección, el antiguo sindicalista le recordó a García que la vida le estaba regalando una segunda oportunidad. No existen las terceras oportunidades, le advirtió con la voz de cachaza como en una de esas parábolas de las que tanto gusta últimamente el mandatario electo.
El diálogo se concentró en el tema fundamental para ambos: la reducción de la pobreza. Alan García aprovechó la mayoría de las dos horas de encuentro para preguntarle sobre su experiencia. Lula le describió el tobogán del equilibrio macroeconómico y las políticas sociales. Es difícil, coincidió con García, pero hay que “meterse a fondo”.
Salida al PacíficoLa posibilidad de un TLC entre Perú y Brasil, tan mencionada por Alan García, fue tocada de refilón. Ya quedó entendido que hay un proceso en marcha con Mercosur (ver recuadro). El peruano viró entonces su atención al aumento de las inversiones brasileñas. Es muy probable que, después de una visita de Estado al Brasil en agosto próximo, se realice un encuentro empresarial de alto nivel entre ambos países. “Declaro al Perú un país abierto a los capitales brasileños, convoco a los industriales e inversionistas brasileños”, explicitó García a su salida.
A su vez, Lula dejó en claro que el Perú era la salida natural de Brasil al Pacífico. El aprista respondió con proyectos de multiplicación de conexiones viales y ferroviarias y alianzas energéticas. Ofreció a Petrobras la posibilidad de aliarse con Petroperú para explorar en nuestro país.
El próximo 24 Lula será proclamado como el candidato del PT. Los números son propicios. Una encuesta dada a conocer el martes último le asigna el 48% de las preferencias. Su rival más cercano, el socialdemócrata Geraldo Alckmin, tiene apenas el 18%. Si esa repartición se mantiene hacia octubre Lula ganaría en primera vuelta, pues en Brasil bastan los votos válidos para conseguir la mayoría absoluta.
La tendencia ascendente del brasileño era difícil de imaginar el año pasado, cuando los escándalos de corrupción estremecieron al PT y el grueso de su plana mayor salió escaldado por la puerta trasera.
A pesar de todo ello Lula tiene muy grandes posibilidades de conseguir un nuevo mandato. La supervivencia obedece a los tiempos en marcha. Su plataforma se basa en lograr mayor crecimiento aparejado de redistribución. Y García tiene los pies puestos en un trampolín continental inmejorable (Enrique Chávez).
CARETAS
lunes, junio 19, 2006
Se viene alianza inédita Perú-Chile
BUENAS RELACIONES • Canciller chileno, Alejandro Foxley, consideró necesario que ambos países se unan para enfrentar a lo que calificó como el "desafío del Asia" • Saludó la próxima visita del presidente electo Alan García Pérez para reunirse con Michelle Bachelet.
Las relaciones peruano-chilenas podrían evolucionar hacia niveles insospechados. El canciller de Chile, Alejandro Foxley, planteó abiertamente una alianza con Perú para enfrentar a lo que denominó el "desafío del Asia".
En entrevista con diario El Mercurio, Foxley dijo que la mejor estrategia para que ambas naciones caminen en armonía es la "cooperación".
Afirmó que en tanto su país viene negociando acuerdos de libre comercio con países asiáticos como China y Japón (ya tiene uno con Corea), llegará un momento en el que los productores chilenos no puedan satisfacer la demanda. "Entonces tendremos que asociarnos con otros países. Lo que estoy planteando es una alianza Perú- Chile para enfrentar el desafío del Asia. Y lo digo en serio", declaró.
Foxley aseguró que Chile está dispuesto a tomar "todas las acciones necesarias" para que ello ocurra. "Es una manera de salir del juego de suma cero en el que, parece, hemos estado mucho tiempo (con Perú)", comentó.
Visita
Estas alentadoras (y hasta cierto punto inesperadas) declaraciones de Foxley son la antesala a la visita que hará a Chile el virtual presidente electo, Alan García Pérez.
Foxley consideró como "un hecho bastante inusual, un gesto especial" que García, "tan prontamente" después de su victoria electoral llegue a Santiago, luego de aceptar una invitación personal de la presidenta socialista, Michelle Bachelet.
Dicha reunión es el corolario a la buena disposición que ha demostrado García hacia el país del sur, a la cual no ha tenido reparos en alabar y felicitar por su desarrollo económico y social. Estos piropos diplomáticos no han pasado inadvertidos por Foxley, quien dijo que lo "dicho y hecho" por García resulta "positivo y estimulante" en tanto abre un "camino de cooperación impensable en el pasado".
Según reseña "El Mercurio", al canciller le pareció "sano" que el Perú desee aprender de la experiencia chilena y competir.
Incluso, Foxley se animó a vaticinar que será "fácil" llegar a un entendimiento con el Perú respecto al diferendo limítrofe, pues los proyectos políticos, sociales y económicos planteados por García y la Concertación son muy cercanos unos de otros. "Espero no equivocarme", agregó.
Agenda
¿De qué pueden conversar García y Bachelet? De acuerdo con el analista internacional, Alejandro Deustua, la cita será básicamente una "toma de contacto" entre jefes de Estado que convivirán durante los próximos años.
Consideró que la agenda peruano-chilena incluye profundizar en el acuerdo de complementación económica, que debería arribar en un acuerdo de libre comercio.
"Así como García habló de un TLC con Brasil, lo sensato sería seguir esa política con Chile", dijo Deustua.
Límites marítimos y la seguridad
Según Alejandro Deustua, otros dos temas de singular importancia con Chile tienen que ver con la delimitación marítima y la seguridad. Respecto a lo primero, afirmó que es preferible que la solución se alcance por vías diplomáticas en vez de jurídicas. Sobre lo segundo, indicó que queda pendiente lo relacionado a la homologación en los procesos de medición de los gastos militares.
De otro lado, el vicepresidente de Venezuela, José Vicente Rangel, pidió "seriedad" a Alan García Pérez para normalizar las relaciones con el Perú. "Me parece muy grave que una persona que acaba de ser electa ya esté cometiendo errores", comentó Rangel, en lo que significa una nueva intromisión en los asuntos internos peruanos.
Perú, entre dos izquierdas
La sacudida continental que han significado el triunfo repetido de Hugo Chávez, en Venezuela, y el de Evo Morales en Bolivia, sumado al ascenso de coaliciones de izquierda o centro izquierda en Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, dio a las elecciones peruanas una importancia que, en otras circunstancias, no hubieran tenido Augusto Zamora
Las elecciones presidenciales celebradas el domingo 4 de junio en Perú, con victoria de Alan García, del histórico partido APRA, puede que hayan sido los comicios más particulares de la historia peruana y unos de las más singulares de Latinoamérica. Por vez primera no competían candidatos de distinto signo ideológico –derecha e izquierda-, o de signo similar –derecha y derecha- como había ocurrido hasta el momento, sino dos candidatos de izquierda, socialdemócrata uno, de la izquierda indigenista el otro. Un hecho inédito, precedido por otro no menos notable, como la derrota en la primera vuelta de la candidata de la derecha, Lourdes Flores, y el triunfo de Ollanta Humala, cuyo partido resultó el más votado y, por tanto, el que mayor número de diputados obtuvo.
La sacudida continental que han significado el triunfo repetido de Hugo Chávez, en Venezuela, y el de Evo Morales en Bolivia, sumado al ascenso de coaliciones de izquierda o centro izquierda en Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, dio a las elecciones peruanas una importancia que, en otras circunstancias, no hubieran tenido. La derrota de Lourdes Flores en la primera vuelta fue el primer shock, pues implicaba que la derecha quedaba fuera de la lid electoral. El segundo shock para la derecha y sus aliados externos fue tener que optar por Alan García como mal menor, ante el horror que les causaba el posible triunfo de Humala, más próximo a Chávez y Morales.
La experiencia de García
Alan García fue presidente entre 1985 y 1990 y su Gobierno uno de los más controvertidos de Perú. Desde posiciones de izquierda, nacionalizó la banca, limitó el pago de la deuda externa al 10 por ciento de las exportaciones peruanas, prohibió a las empresas extranjeras extraer divisas y se enfrentó al Fondo Monetario Internacional (FMI). En política exterior asumió una línea beligerante contra Estados Unidos y en favor de la revolución sandinista en Nicaragua. Durante su toma de posesión, en julio de 1985, se formó el Grupo de Apoyo a las gestiones de paz en Centroamérica del Grupo de Contadora, lo que provocó una gran irritación en Washington. Pese a su prometedor inicio, la parte final de su mandato estuvo marcada por una terrible crisis económica y por las acciones terroristas de Sendero Luminoso. Cuando entregó la presidencia a Alberto Fujimori, su popularidad estaba destrozada.
Estos antecedentes lo convertían en un candidato ingrato para la derecha y EEUU. Sin embargo, la irrupción de Humala y la derrota de Flores transformaron el espectro político peruano, obligando a un forzado reacomodo detrás de García, como barrera ante el ascenso del ex militar Humala. Las discrepancias entre García y Humala no pueden hacer olvidar otros hechos relevantes: García ganó con el 52,77% de votos, por el 47,23% de Humala, es decir, a este último le faltó un 2,78% de votos para obtener la victoria. Por otra parte, Humala triunfó en quince de los veinticuatro departamentos del país, por nueve de Alan García. Su partido, en fin, es la primera fuerza política en el Parlamento peruano, con 45 diputados, por 36 del APRA. Todo ello da a Humala un peso esencial en el nuevo mapa político peruano. Tampoco cabe olvidar que, programas en mano, hay más coincidencias entre García y Humala que entre García y Lourdes Flores.
Alternativa de izquierdas
Perú estrenará un nuevo Gobierno de centro izquierda, que deberá buscar entendimiento y apoyo en un Parlamento dominado por una mayoría de izquierdas. Dado los niveles de efervescencia en el país, los ejemplos movilizadores de Bolivia y Venezuela y el reto de dar respuesta a la miseria y la desigualdad, García tendrá un margen de maniobra limitado, pues necesita aliados para gobernar. Humala, por su parte, ha perdido y ganado al mismo tiempo. Aunque no haya vencido en las elecciones, su poder en Perú lo hace insoslayable y, si sabe administrarse, será presidente del país.
Cualquiera que sea el análisis, algo parece fuera de dudas. Perú no ha votado a la derecha, sino a la izquierda. Alan García está más próximo a la Latinoamérica de Lula, Kirchner, Bachelet y Tabaré Vázquez, que a la de Álvaro Uribe y Vicente Fox. En Perú no se ha detenido el avance de las fuerzas del cambio. Todo lo contrario, se ha consolidado, con una particularidad: en Brasil, Argentina, Chile, Bolivia o Venezuela los gobiernos están sometidos al marcaje (Mundial de fútbol obliga) de la derecha. Alan García tendrá el marcaje desde una izquierda combativa. Y que EEUU deba celebrar la victoria de Alan García prueba lo mal que anda su influencia en Latinoamérica.
Augusto Zamora
Profesor de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de la UAM
La sacudida continental que han significado el triunfo repetido de Hugo Chávez, en Venezuela, y el de Evo Morales en Bolivia, sumado al ascenso de coaliciones de izquierda o centro izquierda en Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, dio a las elecciones peruanas una importancia que, en otras circunstancias, no hubieran tenido Augusto Zamora
Las elecciones presidenciales celebradas el domingo 4 de junio en Perú, con victoria de Alan García, del histórico partido APRA, puede que hayan sido los comicios más particulares de la historia peruana y unos de las más singulares de Latinoamérica. Por vez primera no competían candidatos de distinto signo ideológico –derecha e izquierda-, o de signo similar –derecha y derecha- como había ocurrido hasta el momento, sino dos candidatos de izquierda, socialdemócrata uno, de la izquierda indigenista el otro. Un hecho inédito, precedido por otro no menos notable, como la derrota en la primera vuelta de la candidata de la derecha, Lourdes Flores, y el triunfo de Ollanta Humala, cuyo partido resultó el más votado y, por tanto, el que mayor número de diputados obtuvo.
La sacudida continental que han significado el triunfo repetido de Hugo Chávez, en Venezuela, y el de Evo Morales en Bolivia, sumado al ascenso de coaliciones de izquierda o centro izquierda en Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, dio a las elecciones peruanas una importancia que, en otras circunstancias, no hubieran tenido. La derrota de Lourdes Flores en la primera vuelta fue el primer shock, pues implicaba que la derecha quedaba fuera de la lid electoral. El segundo shock para la derecha y sus aliados externos fue tener que optar por Alan García como mal menor, ante el horror que les causaba el posible triunfo de Humala, más próximo a Chávez y Morales.
La experiencia de García
Alan García fue presidente entre 1985 y 1990 y su Gobierno uno de los más controvertidos de Perú. Desde posiciones de izquierda, nacionalizó la banca, limitó el pago de la deuda externa al 10 por ciento de las exportaciones peruanas, prohibió a las empresas extranjeras extraer divisas y se enfrentó al Fondo Monetario Internacional (FMI). En política exterior asumió una línea beligerante contra Estados Unidos y en favor de la revolución sandinista en Nicaragua. Durante su toma de posesión, en julio de 1985, se formó el Grupo de Apoyo a las gestiones de paz en Centroamérica del Grupo de Contadora, lo que provocó una gran irritación en Washington. Pese a su prometedor inicio, la parte final de su mandato estuvo marcada por una terrible crisis económica y por las acciones terroristas de Sendero Luminoso. Cuando entregó la presidencia a Alberto Fujimori, su popularidad estaba destrozada.
Estos antecedentes lo convertían en un candidato ingrato para la derecha y EEUU. Sin embargo, la irrupción de Humala y la derrota de Flores transformaron el espectro político peruano, obligando a un forzado reacomodo detrás de García, como barrera ante el ascenso del ex militar Humala. Las discrepancias entre García y Humala no pueden hacer olvidar otros hechos relevantes: García ganó con el 52,77% de votos, por el 47,23% de Humala, es decir, a este último le faltó un 2,78% de votos para obtener la victoria. Por otra parte, Humala triunfó en quince de los veinticuatro departamentos del país, por nueve de Alan García. Su partido, en fin, es la primera fuerza política en el Parlamento peruano, con 45 diputados, por 36 del APRA. Todo ello da a Humala un peso esencial en el nuevo mapa político peruano. Tampoco cabe olvidar que, programas en mano, hay más coincidencias entre García y Humala que entre García y Lourdes Flores.
Alternativa de izquierdas
Perú estrenará un nuevo Gobierno de centro izquierda, que deberá buscar entendimiento y apoyo en un Parlamento dominado por una mayoría de izquierdas. Dado los niveles de efervescencia en el país, los ejemplos movilizadores de Bolivia y Venezuela y el reto de dar respuesta a la miseria y la desigualdad, García tendrá un margen de maniobra limitado, pues necesita aliados para gobernar. Humala, por su parte, ha perdido y ganado al mismo tiempo. Aunque no haya vencido en las elecciones, su poder en Perú lo hace insoslayable y, si sabe administrarse, será presidente del país.
Cualquiera que sea el análisis, algo parece fuera de dudas. Perú no ha votado a la derecha, sino a la izquierda. Alan García está más próximo a la Latinoamérica de Lula, Kirchner, Bachelet y Tabaré Vázquez, que a la de Álvaro Uribe y Vicente Fox. En Perú no se ha detenido el avance de las fuerzas del cambio. Todo lo contrario, se ha consolidado, con una particularidad: en Brasil, Argentina, Chile, Bolivia o Venezuela los gobiernos están sometidos al marcaje (Mundial de fútbol obliga) de la derecha. Alan García tendrá el marcaje desde una izquierda combativa. Y que EEUU deba celebrar la victoria de Alan García prueba lo mal que anda su influencia en Latinoamérica.
Augusto Zamora
Profesor de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de la UAM
lunes, junio 12, 2006
Lula estrecha lazos con García
VIAJARÁ A BRASIL • Mañana martes, el líder del Partido Aprista se entrevistará con el mandatario brasileño, quien enviará avión presidencial • García tuvo nuevas frases de elogio para Chile • Sobre Hugo Chávez dijo: "A partir del domingo, perdí la memoria".
En lo que significará su primer acto público internacional después de su virtual elección, Alan García Pérez viajará mañana martes a Brasil, invitado por el presidente de ese país, Luiz Inácio Lula da Silva.
Será una visita corta, de apenas cuatro horas, según informó la oficina de prensa del Partido Aprista. Lula (en un gesto que revela mucho) enviará el avión presidencial. La agenda incluye una reunión en el Palacio de la Alborada, en Brasilia, con el mandatario brasileño y algunos ministros de Estado.
La ocasión se presenta propicia para que Perú y Brasil estrechen relaciones políticas y comerciales (leer enfoque aparte). Y de paso, servirá para que García y Lula evalúen cómo se puede profundizar la alianza estratégica definida por ambas naciones. Efectivamente, Lula cuenta con grandes posibilidades de reelegirse en octubre.
"Votaría por él"
García admira a Lula. Así lo reconoció en una entrevista concedida al diario brasileño "O'Globo", donde afirmó que, si pudiera, votaría por el líder del Partido de los Trabajadores (PT). García recordó que cuando el PT enfrentó serias denuncias por corrupción que desestabilizaron al gobierno, García escribió una carta a los presidentes de la Internacional Socialista con la consigna "Defendamos a Lula". "Sé que él lo tomó con cariño", añadió el virtual presidente peruano.
En la misma entrevista, el líder del APRA expresó su interés en que Brasil observe al Perú como un aliado comercial estratégico. "Tengo la esperanza de que Brasil mire al Pacífico. Éste (Perú) es su puerto", afirmó.
Elogia a Chile
García no solamente se siente cercano a Lula y Brasil pues ha tenido palabras elogiosas para con Chile y su presidenta, la socialista Michelle Bachelet.
"En el caso de Chile hay una convergencia de Estado que lucha contra la pobreza y tiene seis veces más inversión en educación que Perú", declaró al diario argentino "Clarín". No es un secreto que entre García y Bachelet existen coincidencias. Otro artículo, publicado en "La Tercera" de Chile, dio cuenta de que la victoria de García sobre Ollanta Humala Tasso tranquilizó al gobierno de la Concertación.
De hecho, ya se comenta que vendría a Lima el canciller chileno, Alejandro Foxley, con un mensaje personal de Bachelet para el futuro presidente peruano.
Venezuela
Mientras su cercanía a Lula y a Bachelet se hace cada semana más evidente, García también busca echarle agua fría al enfrentamiento verbal y diplomático con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías. No le ha tendido la mano. Acaso tampoco haya perdón, aunque sí olvido.
"A partir de la noche del domingo he perdido la memoria de lo anterior", dijo García en la entrevista al "Clarín". Se refería a Chávez y los insultos proferidos por éste durante la campaña electoral, en su afán por apoyar a la candidatura de Humala Tasso.
Incluso, cuando fue consultado sobre si Chávez podría estar presente en su asunción de mando, el próximo 28 de julio, respondió: "Todos los jefes de Estado están invitados".
García declaró a "Clarín" que con Venezuela mantendrá una relación de jefe de Estado. Y añadió: "Las necesidades nacionales son más importantes que las personales".
García también aseguró que no pretende convertirse en el líder de una corriente anti Chávez en el continente. Desde luego, lanzó una advertencia para el venezolano : "Si alguien quiere molestar, se encontrará conmigo, pero por el momento prefiero ver las cosas con optimismo".
Sin embargo, a pesar de este llamado a tregua, Chávez no cede. Ayer, el presidente de Venezuela se refirió a las relaciones con el Perú, a las que calificó de "congeladas" (ver nota aparte en la página 3).
Debe señalarse que García concedió, además, una entrevista al diario "ABC", de España. En ella, admitió que fue un "agitador continental" durante su primera gestión, pero que ahora tomará las cosas con mayor modestia.
Será una visita corta, de apenas cuatro horas, según informó la oficina de prensa del Partido Aprista. Lula (en un gesto que revela mucho) enviará el avión presidencial. La agenda incluye una reunión en el Palacio de la Alborada, en Brasilia, con el mandatario brasileño y algunos ministros de Estado.
La ocasión se presenta propicia para que Perú y Brasil estrechen relaciones políticas y comerciales (leer enfoque aparte). Y de paso, servirá para que García y Lula evalúen cómo se puede profundizar la alianza estratégica definida por ambas naciones. Efectivamente, Lula cuenta con grandes posibilidades de reelegirse en octubre.
"Votaría por él"
García admira a Lula. Así lo reconoció en una entrevista concedida al diario brasileño "O'Globo", donde afirmó que, si pudiera, votaría por el líder del Partido de los Trabajadores (PT). García recordó que cuando el PT enfrentó serias denuncias por corrupción que desestabilizaron al gobierno, García escribió una carta a los presidentes de la Internacional Socialista con la consigna "Defendamos a Lula". "Sé que él lo tomó con cariño", añadió el virtual presidente peruano.
En la misma entrevista, el líder del APRA expresó su interés en que Brasil observe al Perú como un aliado comercial estratégico. "Tengo la esperanza de que Brasil mire al Pacífico. Éste (Perú) es su puerto", afirmó.
Elogia a Chile
García no solamente se siente cercano a Lula y Brasil pues ha tenido palabras elogiosas para con Chile y su presidenta, la socialista Michelle Bachelet.
"En el caso de Chile hay una convergencia de Estado que lucha contra la pobreza y tiene seis veces más inversión en educación que Perú", declaró al diario argentino "Clarín". No es un secreto que entre García y Bachelet existen coincidencias. Otro artículo, publicado en "La Tercera" de Chile, dio cuenta de que la victoria de García sobre Ollanta Humala Tasso tranquilizó al gobierno de la Concertación.
De hecho, ya se comenta que vendría a Lima el canciller chileno, Alejandro Foxley, con un mensaje personal de Bachelet para el futuro presidente peruano.
Venezuela
Mientras su cercanía a Lula y a Bachelet se hace cada semana más evidente, García también busca echarle agua fría al enfrentamiento verbal y diplomático con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías. No le ha tendido la mano. Acaso tampoco haya perdón, aunque sí olvido.
"A partir de la noche del domingo he perdido la memoria de lo anterior", dijo García en la entrevista al "Clarín". Se refería a Chávez y los insultos proferidos por éste durante la campaña electoral, en su afán por apoyar a la candidatura de Humala Tasso.
Incluso, cuando fue consultado sobre si Chávez podría estar presente en su asunción de mando, el próximo 28 de julio, respondió: "Todos los jefes de Estado están invitados".
García declaró a "Clarín" que con Venezuela mantendrá una relación de jefe de Estado. Y añadió: "Las necesidades nacionales son más importantes que las personales".
García también aseguró que no pretende convertirse en el líder de una corriente anti Chávez en el continente. Desde luego, lanzó una advertencia para el venezolano : "Si alguien quiere molestar, se encontrará conmigo, pero por el momento prefiero ver las cosas con optimismo".
Sin embargo, a pesar de este llamado a tregua, Chávez no cede. Ayer, el presidente de Venezuela se refirió a las relaciones con el Perú, a las que calificó de "congeladas" (ver nota aparte en la página 3).
Debe señalarse que García concedió, además, una entrevista al diario "ABC", de España. En ella, admitió que fue un "agitador continental" durante su primera gestión, pero que ahora tomará las cosas con mayor modestia.
Apra ahorrará S/. 1,530 millones al año
SE VIENE LA AUSTERIDAD • Partido Aprista no solo reducirá los sueldos de los altos funcionarios • También eliminará las prefecturas y sub-prefecturas, recortará al mínimo la publicidad estatal, cobrará las deudas pendientes con el Estado y optimizará las compras estatales.
Está decidido a reivindicar con una gestión basada en la austeridad el mal sabor de boca que en los peruanos dejó su anterior gobierno. Por eso, desde el mismo día de su elección Alan García insiste en que ya puso en marcha el Plan de Emergencia que en 180 días activará los mecanismos con los que promete ahorrar al país 1,530 millones de soles en un año. Los mismos que destinará a programas sociales, promoción de la pequeña empresa y seguridad ciudadana.
El anuncio de la reducción de los sueldos del Presidente y los congresistas a la mitad ha sido la primera y más impactante de las medidas anunciadas. Todo un gesto, además, para una población que tiene la peor imagen del Ejecutivo y el Congreso. Pero no es la única disposición que adoptará para alcanzar la cifra marcada.
Más austeridad
Además del ahorro de los 400 millones de soles en sueldos de altos funcionarios, el Apra promete ahorrar 30 millones de soles con la eliminación de las prefecturas y sub-prefecturas, 250 millones de soles con la reducción al mínimo de la publicidad estatal, 350 millones de soles con el cobro de deudas pendientes que diversas entidades tienen con el Estado y 500 millones de soles fruto de la optimización de las compras del Estado.
Las tres últimas medidas dependen íntegramente del Ejecutivo, pero para reducir los sueldos y eliminar las prefecturas y sub-prefecturas el Apra deberá contar con el respaldo de un Congreso en el que no es mayoría.
De momento y para dar ejemplo el presidente electo Alan García ya aseveró en el diario español ABC que la reducción de sueldos en la administración pública empezará por él, "ya que el país no espera milagros, pero tampoco quiere privilegiados". Y añadió que si bien con esas actitudes no se resuelve la pobreza, lo cierto es que "se tiene menos hambre cuando uno ve que el otro no tiene privilegios".
Un objetivo, el de "lavarle la cara" al Parlamento, es compartido por todos los partidos. No solo UPP y UN están dispuestos a recortarse los sueldos. AF, el Frente de Centro y Renovación Nacional también han respaldado su predisposición a reducir la remuneración congresal desde el primer mes de funcionamiento del nuevo Legislativo.
Coincidencias con UPP
El Apra tampoco tendría mucho problema para eliminar las prefecturas y sub-prefecturas. Durante el debate presidencial y cuando se expuso el plan de gobierno de UPP, Ollanta Humala anunció la misma medida que el partido de la estrella. La única diferencia es que el ex militar cifró el ahorro en 50 millones de soles, 20 millones de soles más que lo estimado por el Apra. De cualquier modo la suma de las 45 curules nacionalistas más las 36 curules apristas ya permitiría a García conseguir su objetivo.
"Ordenaremos el sector público"
La reducción de los sueldos de los altos funcionarios, una vez fijada la URSP, no aumentaría notablemente la nómina salarial del gobierno, tal y como advirtió Pedro Pablo Kuczynski en una entrevista.
Así lo afirmó el director nacional de economía del Apra, Enrique Cornejo, quien aclaró que la medida no es aislada, sino que forma parte de un esquema integral de reforma del Estado. "No se trata de que paguemos menos y contratemos a dos funcionarios. Vamos a ser muy escrupulosos", dijo Cornejo.
El asesor económico también especificó que la reducción de los salarios se refería a aquellos funcionarios elegidos popularmente, y no a aquellos contratados de manera privada para determinados servicios. "Queremos acabar con el desorden en la administración pública. Actualmente existen hasta 37 regímenes de pago distintos".
Cornejo habló de tres pasos a seguir para depurar la administración pública. El primero es la anunciada reducción de sueldos de los altos funcionarios, después seguirá la fijación de una escala única de remuneraciones (adiós a las planillas VIP y PNUD creadas por Fujimori), y finalmente se establecerá un sistema de ascensos por méritos.
martes, junio 06, 2006
Las medidas del Apra para los primeros cien días de gobierno
AUSTERIDAD Y REINGENIERÍA ESTATAL • Voceros adelantan: se fijará Unidad Remunerativa del Sector Público para acabar con los "sueldos dorados" • Se eliminará la CTS para autoridades elegidas por voto popular • 15 mil policías dejarán oficinas para vigilar las calles
El próximo 28 de julio Alan García deberá asumir la conducción del país, y poner en práctica las propuestas que anunció en la campaña electoral para combatir la pobreza y el desempleo en el país.
Según el plan de gobierno del PAP, una de las primeras medidas que adoptarán Alan García y su equipo de colaboradores al tomar el control del Ejecutivo después de 16 años, será fijar la Unidad Remunerativa del Sector Público (URSP), una decisión tantas veces postergada durante la gestión del presidente Alejandro Toledo.
El secretario general del Apra, Jorge del Castillo, explicó que a partir de la determinación de la URSP será posible establecer una escala de remuneraciones que acabe con los "sueldos dorados" en la administración pública. Fijar la URSP permitirá el recorte de sueldo de congresistas, ministros, alcaldes, regidores, presidentes de organismos públicos, presidentes regionales, así como de los técnicos, y del personal de confianza que sirve al Estado.
Recorte de gastos
La eliminación de la Compensación por Tiempo de Servicios (CTS) para el caso de las autoridades elegidas por voto popular, también está en los planes del Apra. Su aprobación, sin embargo, dependerá de la voluntad de las fuerzas políticas del nuevo Congreso.
Otra medida que estudia el Apra es la modificación del reglamento de la ley de services con la finalidad de que un trabajador con un mínimo de tres meses de antigüedad laboral pase a ser contratado directamente por la empresa a la que preste servicios, sin necesidad de intermediarios.
Para los primeros días de gobierno, también se contempla reducir al mínimo la publicidad estatal. De igual modo, se prohibirá la contratación de consultores, lo que permitirá al Estado ahorrar 600 millones de soles. Los fondos que no se gasten serán revertidos a la caja única y luego a través de créditos suplementarios reorientados a los sectores más necesitados.
Necesidades básicas
En cuanto a los programas sociales, una medida inmediata que adoptará el gobierno de Alan García será ampliar la entrega del "Vaso de Leche" de 240 a 365 días al año. El número de beneficiados por este programa, sin embargo, no será modificado.
En cuanto a la seguridad ciudadana, Mauricio Mulder explicó que ni bien asuma la presidencia Alan García, se destinará un crédito suplementario al Ministerio del Interior para que la Escuela de Policías amplíe el número de sus vacantes en el próximo concurso de admisión.
Adicionalmente, se proyecta realizar una reingeniería en la Policía Nacional a fin de que unos 15 mil efectivos que ahora cumplen labores administrativas vuelvan a las calles para combatir la delicuencia. Otra medida a adoptarse en este sector será pasar del sistema de servicios de 24 horas de trabajo por 24 horas de descanso, al servicio diario.
El nuevo gobierno, de otro lado, dará prioridad a la entrega de títulos de propiedad. Para lo cual promoverá la dación de normas que permitan la simplificación administrativa en Cofopri.
Banco Agrario y agua potable para los pobres
Seguido del plan de titulación de propiedades, el próximo gobierno lanzará el programa "Agua para Todos", que con una inversión de S/. 180 millones provenientes de la reducción de gastos beneficiará a medio millón de personas en Lima y Callao, explicó Jorge Del Castillo.
El congresista y dirigente del Apra Mauricio Mulder agregó que en los primeros 100 días de gobierno también se tomarán las medidas correspondientes para reactivar el Banco Agrario y comenzar con la inyección de presupuesto hasta doblar su capital.
También se darán las normas necesarias para que el Banco de la Nación pueda operar como banca privada con capacidad para otorgar créditos a los pequeños empresarios.
Se organizará la licitación para la concesión de las 28 carreteras que consigna el Apra en su plan de gobierno.
En materia de Educación, Mercedes Cabanillas precisó que uno de los temas prioritarios será implementar la ley recientemente aprobada por el Congreso, referida a la evaluación, acreditación y certificación de la calidad educativa.
En ese sentido, pondrán énfasis en el fortalecimiento del Plan Nacional de Capacitación del Docente.
